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AL FINAL LA JUSTICIA Y LA VERDAD TRIUNFAN

Ayer domingo, día 3, La Voz de Galicia publicó una interesantisima separata que aborda los episodios más importantes de la Historia de La Coruña a lo largo de los 45.339 días en que este diario viene saliendo a la calle para informar a los coruñeses.

En setenta y dos páginas muy bien presentadas se recogen los instantes de más relieve de la vida ciudadana a lo largo de los años. La llegada del tren de Madrid; la inauguración de la Avda. de Alfonso Molina; la Residencia Sanitaria; la Refinería; Alvedro; etc., son algunos de los hitos recogidos en esta separata.

La penúltima página la dedica a la noche de San Juan y en ella, Javier Becerra, reconoce el trabajo tanto de la Comisión Promotora como de la Asociación de Meigas para sacar adelante y potenciar la fiesta de las HOGUERAS.

Tras largos años de decadencia, después de otros de gran esplendor, fue en la plaza de Portugal, así lo reconoce el articulista, donde la Comisión Promotora hizo que la mágica noche de San Juan resurgiese con fuerza. Luego vinieron las playas justo a partir de que la Comisión cambiase la ubicación de su Hoguera y a partir de ahí los merecidos títulos hasta que la Asociación de Meigas obtuvo el de Fiesta de Interés Turístico Internacional.

Nada surgió solo, de la nada; todo fue fruto de un proyecto meditado y de un trabajo constante, sin pedir nada a cambio, en el que el objetivo primordial era huir de la mediocridad y ofertar a la ciudad una fiesta como se merece.

Fueron Meigas Mayores las que solicitaron las sucesivas declaraciones de Fiesta de interés de Galicia, nacional e internacional; incluso fue una Meiga Mayor, tras una amplia operación de recogida de miles de firmas, quien solicitó que el día 24 de junio se declarase festivo local.

Cientos de jóvenes coruñesas nombradas Meigas; miles de actos celebrados; publicaciones; composiciones musicales; exposiciones; concursos… Nadie hizo tanto en nuestra ciudad por la noche de San Juan como primero la Comisión Promotora y más tarde la Asociación de Meigas, algo que nadie, jamás, por mucho que se empeñe podrá sustraernos pues es historia.

Luego, en 2015, vinieron los oscuros tiempos en los que el sectario revanchismo surgió en nuestra ciudad como triste y negra bandera; tiempos de desprecios, de insultos, de ofensas gratuitas, tratando de eliminar nuestra presencia y la de las Meigas, sustrayéndonos casi cincuenta años de trabajo callado y serio, tratando de borrarnos de un plumazo por negarnos a bajar la cabeza.

Agradecemos este reconocimiento que nos hace La Voz de Galicia pues sirve para poner a cada uno en su sitio y demuestra que por mucho que estos de la marea se empeñen en dar la espalda a la verdad, mientras existan hemerotecas esta no se podrá recatar.

Al final, lo único que importa es que ellos, tarde o temprano, se irán pasando  a figurar su triste recuerdo en una de las páginas más oscuras de la Historia de La Coruña y nosotros, sin embargo, seguiremos ahí.

Muy interesante este trabajo de la La Voz de Galicia que vale la pena leer.

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