¿POR QUE NO POSA IGUAL CON LAS MEIGAS?
Lo sabíamos y si la fotografía tomada en el balcón central del Ayuntamiento de Valencia, en la jornada del 19 de marzo, nos vino a dar la razón, esta nueva que hemos encontrado en la red nos lo reafirma.
No acertamos a entender como alguien que jamás se ha dignado a recibir a las Meigas, pese a ser coruñesas e hijas de quienes pagan los impuestos municipales y por ende su sueldo; alguien que de forma sistemática y arbitraria ha prohibido expresamente la celebración de actos que desde 1970 presidían las Meigas; alguien cuyos correligionarios y correligionarias en el gobierno municipal, todos ellos a sus órdenes, se han permitido insultar a las Meigas tildándolas de «mujeres florero» e incluso «Falleras de Rita Barberá»; alguien que de forma sistemática viene despreciando a la Asociación de Meigas desde su llegada al Ayuntamiento, dándole un tratamiento desigual con relación a otras Entidades de menor solera; ahora posa con las Falleras Mayores de Valencia con una sonrisa de complacencia en el rostro.
Sabemos que argumentará que se trataba de un acto oficial de representación, pero ¿acaso no lo es la celebración de la Virgen del Rosario, Patrona de La Coruña? y, en ese caso, ¿por qué no asiste con la misma diligencia independientemente de sus creencias religiosas que resultan del todo irrelevantes? Cuando alguien no cree en algo, por consecuencia no participa de ellos en medida alguna y de hacerlo, lo hace, como dicen ellos, no como la casta que tanto criticaban antes de ellos asumir el rol, sino como «a xente do común», frase con la que se les llenaba la boca.
El problema es que los tiros no van por ahí. Que tan solo se trata de cargarse las celebraciones inveteradas de la ciudad: la celebración del Rosario; la Función del Voto, reemplazada por una pantomima populista; la Semana Santa; las fiestas de Navidad, etc., y, por supuesto, el San Juan.
Sin duda ahora comenzarán, por boca de los secuaces, las descalificaciones y los insultos. Volverán con la cantinela de que la Asociación de Meigas «hace apología del franquismo», ¿donde la hace?, ¿en que actos?, ¿en que momento?, ¿en que circunstancias?
De sobra saben que mienten. Solo tienen que preguntarle a las mujeres y jóvenes coruñesas que conforman la Entidad, esas a las que jamás se ha dignado a recibir. Pero les da igual, mienten de forma reiterada, tal vez sin llegar a comprender que una mentira, por muchas veces que se repita, SEGUIRA SIENDO MENTIRA.
(Foto tomada de las redes sociales)
