NUESTRA SOLIDARIDAD CON ROSA GALLEGO

Hemos leído que hace un par de días con motivo de celebrar su cumpleaños el alcalde de la marea, que no de La Coruña, un graciosillo de esos que abundan en las redes sociales, suponemos que de la misma cuerda que el citado alcalde, le envió un mensaje de felicitación en el que aparecía una tarta de la que emergía la Concejala Popular, Rosa Gallego Neira, con ropa de baño. Un mensaje tan desafortunado como todo lo que suele hacer esta gente que se permite el lujo, en base a no se sabe bien que superioridad moral, para ofender a quien le da la gana, poniendo el grito en el cielo y tachando de fachas a todos los que los no piensan como ellos.

Lamentamos este hecho por la falta de respeto hacia una dama como Rosa Gallego de la que tienen mucho que aprender estas de la cuerda política de los que mal gobiernan la ciudad; pero además consideramos que cuando se quiere hacer una gracia se debe de utilizar la imagen de algún familiar, amigo o simpatizante de quien pretende hacer o, en este caso si se quiere, con la de alguna de las concejalas de la marea, aunque claro…

Pero, con todo, lo grave no es que uno de esos «valientes» que se esconden tras el anonimato en las redes sociales se quiera hacer el gracioso enviando un montaje como este al que nos estamos refiriendo, lo realmente grave es que alguien que ostenta un cargo de Autoridad como es este alcalde de la marea haga risitas a semejante burdo mensaje en lugar de disculparse públicamente y afear la conducta de quien se lo remitió.

Pero estos y estas son así; luego se rasgan las vestiduras porque las mujeres en la «Carrera de la mujer» usen camiseta rosa o porque algún barrio nombre su Reina de las Fiestas que prohíben de forma expresa bajo amenaza de no otorgarles un duro de subvención que, por cierto, es con dinero de todos.. Pero bueno, el machismo repugnante tanto de estos como de estas ya lo conocíamos cuando se atrevieron a llamar a las Meigas «mujeres florero», así que nada nos sorprende.

Poco a poco vamos descubriendo el pelaje de esta gente. Todavía estamos a la espera de que cuelguen en la fachada del Ayuntamiento, que es de todos, una pancarta reclamando la unidad de España, algo que estos a lo que se ve no desean, o de apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, un sentimiento mayoritario de todos los coruñeses; pero no, ellos prefieren encabezar manifestaciones en demanda de que los catalanes puedan conculcar la Constitución en las que hemos visto a alguna concejala de su partido que, curiosamente, tiene responsabilidad en materia de seguridad ciudadana.

En fin, volvemos a insistir en lo que llevamos pensando desde aquel maldito día de mayo de 2015, una ciudad no puede llegar a menos ni una gente a más, pero, eso sí, la culpa no es solo de ellos.

Nuestra cariñosa adhesión a Rosa Gallego con el deseo de que no olvide que no ofende quien quiere, sino quien puede y este no es el caso.